15 años de Metal Gear Solid 3: Snake Eater, la mejor obra de Kojima

La tercera parte de una de las mejores sagas de la historia de los videojuegos, una capaz de marcar a una generación de jugadores para siempre. Por primera vez en la saga dábamos un salto al pasado y en lugar de Solid Snake, Liquid, Raiden y el resto de personajes, afrontábamos dos de las misiones más importantes de Naked Snake, que en el futuro sería rebautizado como Big Boss. El personaje más importante de la historia de Metal Gear Solid, sobre el que giran todos los acontecimientos y la mayoría de los personajes principales. Menudo personaje.

Para muchos The Boss sigue siendo uno de los mejores personajes jamás creados en un videojuego. Es impresionante cómo un juego que cumple hoy quince años sabe proporcionar tantos mensajes vigentes en nuestra sociedad actual a través de un personaje tan potente. Sobre su idea de un mundo ideal surgen los enfrentamientos futuros entre Zero y Big Boss, tratando de emular y comprender su legado. Naked Snake fue entrenado por The Boss, fue su mentora, pero no sólo eso.

Es su misión, él es un soldado. Su función e historia es determinante en la saga, pero cuenta con un comienzo y un final propio, abriendo y cerrando su propio círculo. Para mí, la mejor entrega de una franquicia muy especial y la mejor obra de uno de los autores más importantes de la historia.